El crecimiento económico se mide a través del producto interno bruto (PIB), el cual representa el valor de mercado de todos los bienes y servicios producidos en un país durante el año. En el artículo anterior me referí al fenómeno recurrente de crecimiento y decrecimiento económico que es inherente a las economías capitalistas. Este patrón ascendente y descendente de crecimiento se conoce como ciclo económico.
El ciclo económico tiene cinco fases:
Expansión
Pico
Recesión
Sima
Recuperación
Expansión
En esta fase hay una mayor demanda de bienes y servicios, la cual se acompaña de:
Producción incrementada;
Inflación estable;
Aumento de las ganancias corporativas;
Creación de empleo estable, o su mejora;
Fuerte actividad bursátil;
Aumento de los ingresos personales, lo que induce a las personas a tener un sentimiento de seguridad financiera y gastar más dinero;
Pico
El pico económico ocurre cuando la economía llega su máximo crecimiento económico, y:
Las empresas comienzan a tener problemas para satisfacer la demanda;
La creación de empleo que se produjo en la fase de expansión provoca escasez de mano de obra en el mercado laboral;
Las empresas no pueden encontrar suficientes personas calificadas para satisfacer sus necesidades de contratación;
Los salarios aumentan, pues los empleadores compiten para contratar mano de obra;
La demanda de bienes y servicios comienza a exceder la oferta porque las empresas no pueden producir bienes lo suficientemente rápido;
Como resultado, los precios de los bienes aumentan, lo cual puede resultar en inflación.
Recesión
La recesión significa que la economía está en declive. Si una economía experimenta dos trimestres consecutivos de crecimiento negativo o contracción, se llega a lo que se conoce como recesión.
Resultado:
Las ventas disminuyen;
El nivel de inventarios aumenta;
Las empresas pueden tener que bajar los precios a medida que aumenta su capacidad de oferta;
Las empresas comienzan a reducir su producción;
La caída de las ventas reduce las ganancias y las empresas pueden comenzar a tomar medidas para reducir los costos (despido de empleados);
La tasa de desempleo tiende a aumentar, lo cual deprime aún más el nivel de gasto del consumidor;
La demanda de bienes continúa cayendo;
A medida que las condiciones comerciales se deterioran, la actividad económica se desacelera en la mayoría de los sectores empresariales;
Sima
A esta fase del ciclo económico se llega con un nivel máximo de inflación, debido a la presión acumulada al alza de los precios, así como de los de los salarios; lo cual ha provocado que las tasas de interés aumenten. A medida que se vuelve más costoso para los individuos y para las empresas tener acceso a capital fresco, el gasto del consumidor y la inversión empresarial comienzan a disminuir.
Las ventas han caído de manera significativa y, poco después, los precios de las acciones caen en reacción a la caída de las ventas y los niveles de ganancias. El ciclo de crecimiento llega a su punto más bajo.
En este momento la economía se puede caracterizar como sigue:
A medida que continúa la recesión, la caída de la demanda y el exceso de inventarios impiden a los trabajadores exigir salarios más altos; a su vez se reduce la capacidad de las empresas para aumentar los precios de sus mercancías; los despidos pueden continuar;
Estos factores ponen presión a la baja de los precios; la inflación comienza a disminuir;
Cuando caen las presiones inflacionarias, también lo hacen las tasas de interés; las tasas de interés más bajas inducen a los consumidores a comenzar a gastar nuevamente, aumentando las ventas; los precios de las acciones comienzan a aumentar;
Recuperación
La economía en esta etapa comienza a mejorar hasta que el PIB alcanza el nivel que tenía antes de que se iniciara la contracción.
La recuperación puede describirse como sigue:
Las tasas de interés han caído;
La recuperación comienza con un resurgimiento de la demanda de artículos que los consumidores suelen comprar con crédito (por ejemplo, casas y automóviles);
Las empresas responden a esta demanda renovada utilizando el inventario que se acumuló durante la recesión (sin embargo, no comenzarán a recontratar a gran escala o invertir en nueva capacidad durante algún tiempo);
El desempleo sigue siendo alto, por lo que la presión salarial a la baja hace que la inflación disminuya aún más;
El ciclo vuelve a comenzar.
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Recuerda: no dejes para mañana lo que debiste hacer ayer hacer ayer.